miércoles, 9 de enero de 2008

Fundamento de una Supervisión Holística en Telesecundaria Valle de México

PRESENTACIÓN

Después de varios meses de intenso trabajo de análisis, en el que participó toda la estructura de supervisión del Departamento de Telesecundaria hemos concluido una primera propuesta de modelo de supervisión modernizada. Desde que aparece el Programa de Modernización de la Función Supervisora en 1997 se impulsaron una diversidad de acciones que han sido evaluadas en su momento. Para la actual administración del departamento quedan claros los elementos de valoración de las últimas acciones, como es el caso del taller “El ejercicio de la función supervisora en educación secundaria: un ejercicio para la autoformación” en el que participamos y que fue realizado como parte de una acción estratégica de carácter formativo, dirigido a Jefes de Sector, Supervisores, Jefes de Enseñanza y Apoyos Técnico Pedagógico, con la intención de fortalecer “su desempeño por medio de la revisión crítica de su práctica, la reflexión colegiada, la realización de trabajo de campo y la generación de formas de intervención, que les permitan apoyar eficientemente y con calidad, el logro de los propósitos educativos de la educación secundaria”. Todo ello en el marco del PMFS, el cual se planteó como propósitos:
“Para el propio sistema de supervisión:
a) Rescatar el sentido académico de la función supervisora y replantear su papel como un elemento fundamental para el logro de la calidad de la educación básica secundaria.
b) Dinamizar la planta de personal dedicada al ejercicio de la función supervisora en sus dos modalidades, técnico administrativo y técnico pedagógica.
Para el sistema de educación básica secundaria:
a) Impulsar a la Supervisión Escolar como una instancia de apoyo a la toma de decisiones y a la ejecución de programas educativos.
b) Contar con un medio eficaz para el apoyo y control de la operación del sistema de educación básica secundaria.
c) Favorecer la articulación de la educación básica secundaria.”

Por otra parte se planteó “Consolidar la transformación de la función supervisora e impulsar los proyectos educativos de sector y escolares, como una alternativa para atender los problemas pedagógicos prioritarios de las escuelas secundarias, y coadyuvar al logro de la misión institucional de los SEIEM”.

El taller se llevó a cabo en diez sesiones, del 8 de octubre de 2003 al 16 de marzo de 2004, en dos etapas.
Los contenidos de la primera etapa fueron:
1. Encuadre. La función supervisora hoy, perspectiva para el futuro. El ejercicio de la supervisión, pasado, presente y futuro. (8 de octubre)
2. El Programa de Modernización de la Función Supervisora, avances y retos. (10 de octubre)
3. Los procesos de intervención educativa y sus implicaciones en el ejercicio de la supervisión. Construcción colectiva del futuro...la escuela que queremos (el diagnóstico escolar) (14 de octubre)
4. Los proyectos educativos escolares como estrategia de gestión. Los indicadores numéricos y el desarrollo integral de los alumnos (indicadores de calidad en el centro escolar) (16 de octubre)

En la segunda etapa se trabajo:
1. Gestión participativa. Hacia la construcción del diagnóstico escolar. (4 de noviembre)
2. Gestión participativa. Hacia la construcción del diagnóstico escolar. (25 de noviembre)
3. Los proyectos educativos escolares como estrategia de gestión. Elementos que integran un proyecto educativo (Análisis contextual y planteamiento de metas para mejorar el rendimiento escolar). La toma de decisiones a partir de indicadores educativos. (13 de enero)
4. La función supervisora desde la mirada de la gestión. La intervención educativa...herramienta para generar estrategias. Fundamentos de la supervisión y la gestión en educación secundaria...perspectiva actual. (3 de febrero)
5. Propuesta para una supervisión integral. Ámbitos de acción de la función supervisora. Hacia la reorientación de la función supervisora. (24 de febrero)
6. La evaluación de la función supervisora. Los procesos de planeación evaluación. (16 de marzo)

Como resultado de este proceso surgieron tres tareas centrales:
1. Desarrollar una propuesta para generalizar en el sector el “Taller para innovar la gestión escolar en educación básica”, como medio para reflexionar sobre el campo de trabajo sobre la práctica de la supervisión.
2. Proponer una auto evaluación de la función supervisora.
3. Generar una propuesta para una supervisión integral.



El proceso del taller lo calificamos como:
 Interactivo.- porque nos permitió la vinculación de las tres modalidades de educación secundaria.
 Participativo.- porque pudimos integrar propuestas
 Propositivo.- porque consolidamos una visión de futuro como resultado del taller y de otras tantas acciones que le antecedieron.

De manera general podemos decir, desde el aspecto metodológico, que se cubrieron diversos momentos en el proceso de modernización de la función supervisora: 1) de recuperación de la experiencia de los equipos de supervisión; 2) de conceptualización de la función supervisora; 3) de desarrollo de un ejercicio de integración de supervisión integral, asumiendo el liderazgo pedagógico en la elaboración del Proyecto Educativo Escolar en las escuelas, y finalmente 4) integrando una propuesta de supervisión integral. En cada momento se manifestaron los logros y deficiencias de la supervisión escolar, a partir de que buscamos comprender hasta donde se trascendió con esta actividad en el mejoramiento de nuestro desempeño profesional y los resultados educativos.







I. DIAGNÓSTICO

Hemos concluido, a partir de diversas sesiones de análisis en torno a lo que ha sido la supervisión, que en nuestra modalidad educativa existen, como nudo crítico, desniveles en la apropiación de referentes teórico metodológicos sobre la función supervisora y en el desarrollo de competencias de intervención pedagógica. Para lo cual nos planteamos, obviamente, consolidar dicha función y el desarrollo de competencias de acompañamiento e intervención pedagógica, a través de acciones formativas que permitan nivelar la apropiación de referentes teórico metodológicos en los distintos campos de nuestra vertiente para favorecer los procesos educativos. Así como promover la apropiación y aplicación eficiente del modelo pedagógico de telesecundaria, racionalizando los cambios y adaptaciones que los docentes han generado con su práctica.


RECONOCEMOS COMO LOGROS:
 Avances significativos en la formación y adquisición de una nueva cultura de participación
 Se vienen evidenciando cambios sustanciales en la práctica profesional y en la gestión educativa
 Se percibe una mayor capacidad de innovación y creatividad en el trabajo cotidiano
 Se ha aclarado más el papel de la función supervisora modernizada y se reflejan avances en la apropiación de referentes conceptuales, si bien no en la medida de lo deseable.
 Se ha incrementado la interacción con docentes y directivos.
 Se reconoce una mayor disposición al trabajo individual, en equipo o grupal.
 Se ha potenciado la reflexión sobre los procesos educativos.
 Se ha puesto mayor relevancia al trabajo técnico pedagógico
 Se reconocen avances significativos en la colegiación e impulso en las escuelas. Se consolida la noción de trabajo colegiado como forma principal de la gestión.




DEFICIENCIAS QUE SE RECONOCEN:

 Desniveles en la apropiación y aplicación de los referentes teórico-metodológicos de la función supervisora
 Desniveles en los desempeños. No todos observan el mismo nivel de cumplimiento y compromiso.
 Se requiere consolidar la cultura de evaluación sistemática y holística.
 No hay todavía una definición clara sobre la metodología, técnicas e instrumentos del acompañamiento académico y la intervención pedagógica
 No se ha logrado un ritmo de trabajo que permita cumplir a cabalidad con el plan de acompañamiento
 No se ha logrado que los supervisores en su totalidad regresen a directores escolares y docentes las conclusiones sobre su trabajo de acompañamiento. Lo único que se continúa haciendo es una rendición de cuentas demasiado general.

II
MARCO TEÓRICO

“La aceptación del principio no basta para satisfacer
nuestros deseos, que muy limitados serían si hubieran
de concretarse a la estéril vanidad de adoptar un
precepto teórico sin el propósito meditado y firme de
ponerlo en ejecución, lo cual equivaldría a desconocer
el espíritu eminentemente práctico de nuestro siglo.”
Joaquín Baranda
(Ex ministro de Justicia e Instrucción Pública en 1889)


Hablamos de acompañamiento pedagógico, no como contraposición a la expresión más común que ha sido la de acompañamiento académico; sin embargo consideramos que el término pedagógico es más esclarecedor de la visión con la que pensamos orientar la función supervisora hacia el desarrollo de un nuevo paradigma en este sentido. El término pedagógico encierra la necesidad de la investigación educativa y por tanto de la reflexión teórica recuperadora de la experiencia docente y escolar que cotidianamente se genera en nuestras escuelas. Lo pedagógico se opone a lo meramente práctico e intuitivo de la labor educativa. Lo pedagógico tiene que ver con la construcción profesional de la disciplina, con un acercamiento científico al hecho educativo, con la delimitación de objetos específicos de estudio y consecuentemente con la problematización desde el campo formativo.

No todo lo académico es un acto pedagógico, pues la enseñanza es académica, pero no necesariamente pedagógica. Si consideramos que el término académico, viene de la expresión griega Academus, que era la estatua de un general griego, bajo la cual el filósofo Sócrates reflexionaba con sus discípulos, veremos que academia no es sino el lugar de reunión para pensar. Estableciendo un paralelismo entonces diremos que la academia moderna es un espacio para pensar el conocimiento, pero no necesariamente la forma cómo se enseña o se orienta hacia su construcción y/o descubrimiento, ni las consecuencias formativas que de esto deviene, lo cual es objeto de estudio de la pedagogía.

Por otro lado, consideramos el enfoque constructivista porque constituye una estrategia, que no un marco teórico, de intervención en la realidad. El constructivismo no se plantea enseñar, sino colaborar en la estructuración de saberes, mal nos veríamos si continuáramos con las viejas prácticas de supervisión, en donde el sujeto que la ejercía se presentaba como el que sabía y por tanto el que llegaba a enseñar al docente como hacer las cosas, el que llegaba investido de autoridad política y administrativa, pero no necesariamente pedagógica. Hablar, por eso, de acompañamiento pedagógico constructivista, es reconocernos como una entidad coadyuvante de la enseñanza y colaborativa con los docentes para el mejoramiento continuo de su desempeño, en una influencia mutua que informa, orienta, toma decisiones y acepta nuevos retos.

Lo holístico tiene que ver con la visión de totalidad, la realidad educativa es una parte de la realidad, pero constituye una totalidad en sí misma, la visión de totalidad obliga a no ser parcial y asumir la función buscando desarrollar nuestra intervención pedagógica con objetividad, es decir con una interpretación de totalidad de las situaciones educativas, estableciendo el mayor número de relaciones de la o las variables estudiadas como elementos de causa que nos esclarezcan el sentido de los problemas a resolver.

Nuestro modelo de supervisión, esta pensado para generar un mayor involucramiento de los actores educativos en la solución de problemas educativos y en la transformación de las escuelas a través de una gestión educativa de calidad. La participación la comprendemos hoy de manera diferente. Entendemos el concepto de participación como la intervención en la toma de decisiones, y no sólo como el establecimiento de canales multidireccionales de comunicación y consulta. La participación completa sólo se da cuando las decisiones se toman por las propias personas que han de ponerlas en acción.

La participación se comprende cómo la intervención de individuos o grupos de personas en la discusión y toma de decisiones que les afectan para la consecución de objetivos comunes, compartiendo para ello métodos de trabajo específico.

Para que se produzca una auténtica participación deben, por tanto, cumplirse los requisitos siguientes:

 Que el grupo esté formado por individuos que tienen intereses comunes
 Que tales individuos estén dispuestos a lograr conjuntamente unos determinados objetivos
En ocasiones, resulta difícil articular la participación a través de la intervención directa de todos los miembros de un sistema u organización. Una de las estrategias que se utiliza en estos casos es el establecimiento de comisiones, equipos o grupos de trabajo. Pero para que estos últimos resulten eficaces han de reunir como requisitos:
 Estar investidos de autoridad en la gestión encomendada
 Representar todos los intereses en torno al tema o los temas a tratar
 Estar dotados de capacidad técnica sobre el tema (lo que supone un adecuado conocimiento del mismo). (Participación en la gestión educativa, de Samuel Gento Palacios. Ed. Santillana. Col. Aula XXI, Madrid, 1994.)

El otro elemento que orienta la función supervisora modernizada es la gestión educativa de calidad la cual ha sido definida así:

La Gestión Educativa de Calidad es un paradigma que permite a las escuelas y a las unidades administrativas orientar de forma permanente su funcionamiento hacia la mejora de procesos y resultados. La Gestión Educativa de Calidad establece la participación de la comunidad como contexto del proceso educativo; el papel del alumno como parte central de los procesos de enseñanza y aprendizaje, y el papel de los directivos como líderes que realizan los procesos. La Gestión Educativa de Calidad tiene como objeto:

• Crear las condiciones institucionales para satisfacer las necesidades de aprendizaje de los estudiantes, alcanzar los propósitos educativos y solucionar los problemas que obstaculizan el logro de éstos.
• Lograr la satisfacción de los usuarios del servicio público de la educación, de los profesores y del personal no docente.

Sus rasgos generales son:

• Liderazgo.- Impulsa la planificación y la estrategia del centro educativo hacia la consecución de la mejora permanente de sus resultados.
• Relevancia.- Procura la vinculación de la escuela con la comunidad
• Democracia.- Propicia la amplia participación en la toma de decisiones y en la solución de problemas
• Rendición de cuentas.- Informa permanentemente sobre resultados
• Transparencia.- En el manejo de la información y los recursos
• Actualización.- Promueve la superación profesional
• Responsabilidad
• Colaboración.- Promueve el trabajo en equipo y la autorregulación
• Eficiencia en la gestión administrativa
• Autonomía.- Para la toma de decisiones propias y para la aplicación de acciones
• Integralidad
• Prioridad en el aprendizaje

(Propuesta de Gestión Educativa de Calidad para Telesecundaria (documento para directivos). SEP. Educación Telesecundaria. México 2001. pp. 80-84)
























III
DEFINICIONES BÁSICAS

Consideramos necesario establecer estas definiciones por que en ellas reunimos los principios pedagógicos que habrán de configurar una nueva práctica de supervisión, además que llevan implícitos los elementos metodológicos a los que nos atendremos durante su desarrollo.


3.1 EL CONCEPTO DE SUPERVISIÓN ESCOLAR

La supervisión escolar es un proceso de mediación pedagógica, integrador, funcional, dinámico y permanente. Es la función institucional que tiene como propósito apoyar la gestión educativa a través de acciones de acompañamiento constante, asesoría, orientación, seguimiento y evaluación; observando el cumplimiento de las políticas educativas vigentes y los objetivos que marcan los programas de estudio. La supervisión escolar es integral e integrada: integral por su carácter holístico, pues interviene en todas las dimensiones y ámbitos coadyuvantes del hecho educativo, e integrada porque se asume como una responsabilidad compartida por los jefes de sector y supervisores técnico administrativo y técnico pedagógico, cada uno desde su nivel de responsabilidad.


3.2 MEDIACIÓN PEDAGÓGICA

La mediación pedagógica es una estrategia promotora del cambio y de la mejora continua del servicio educativo. Supone una relación dialéctica entre realidad e intencionalidad, entre lo que es necesario y lo que se tiene, entre los fines educativos y las condiciones que se presentan para su realización. La mediación pedagógica busca generar los equilibrios y consensos necesarios entre los agentes educativos, de tal forma que les permitan actuar con objetividad en el mejoramiento del desempeño profesional y los resultados de la enseñanza.





3.3 ACOMPAÑAMIENTO E INTERVENCIÓN PEDAGÓGICA

Se entiende por acompañamiento e intervención pedagógica, el diálogo pedagógico entre pares, es decir una intervención problematizadora o acción participativa de los que ejercen la función supervisora, en torno al escenario formativo. Desde aquí se construye una comunicación horizontal entre sujetos pedagógicos, y más que un acto burocrático autoritario e inhibidor es una acción reflexiva sobre el proceso educativo. Es un acto de encuentro y de colaboración profesional que busca armonizar los intereses escolares, generando los consensos necesarios para la transformación del servicio, de tal forma que permitan el mejoramiento de las relaciones humanas y los ambientes escolares, logrando, como consecuencia, elevar la calidad de la educación. De ninguna manera busca obstruir o interferir en la vida interna de las escuelas.


3.4 COMUNICACIÓN EDUCATIVA

La supervisión escolar, como factor de comunicación, es una fuente de información oportuna y de coordinación eficiente, el docente informa e interpreta el estado que guarda su grupo con respecto a los propósitos educativos y el supervisor conoce y hace acopio de datos que interpreta; ambos se influyen y aportan al mejoramiento de sus propios desempeños; por eso, quien ejerce esta función debe tener las competencias pedagógicas necesarias para su desempeño exitoso, lo cual exige conocer básicamente:

 Las políticas educativas vigentes
 El marco normativo de su gestión
 Los programas de estudio y sus enfoques didácticos
 El modelo pedagógico y metodología de la vertiente
 El perfil del alumno de secundaria
 El perfil del docente
 Las teorías pedagógicas de actualidad
 La metodología y técnicas del acompañamiento e intervención pedagógica
a fin de apoyar a directores y docentes con propiedad.



IV
ÁREAS DE DESEMPEÑO DEL ACOMPAÑAMIENTO E INTERVENCIÓN PEDAGÓGICA

Entendemos como área de desempeño al conjunto de acciones de un mismo género que constituyen y dan sentido a un campo de trabajo.
Reconocemos como parte del acompañamiento pedagógico las siguientes áreas de desempeño de la función supervisora:
• INVESTIGACIÓN EDUCATIVA
• PLANIFICACIÓN
• EVALUACIÓN
• FORMACIÓN Y SUPERACIÓN PROFESIONAL
• MEDIACIÓN Y REORIENTACIÓN DE PROCESOS
a cada una le corresponden diversas actividades.


4.1 INVESTIGACIÓN EDUCATIVA

La investigación educativa, en relación con la función supervisora, es el acto de indagar sobre el estado que guarda la realidad educativa. Es convertir el acompañamiento académico en una oportunidad para investigar, y de esta manera dar sentido a la intervención pedagógica que se realiza en todas las dimensiones de la gestión educativa, haciéndola más sistemática, racional y productiva; visto así, la investigación es el fundamento de la intervención pedagógica, porque se realiza antes, durante y después de la misma.
La investigación educativa nos permite un proceso permanente de autoformación y profesionalización de la función supervisora y el desempeño directivo y docente. Tiene como propósito avanzar en la cientifización de la función supervisora, buscando superar la intervención empírica y pragmática que ha caracterizado la supervisión tradicional; así como transformar las relaciones de trabajo en una práctica y una cultura más académica y de comunicación horizontal. De esta forma el trabajo se integra compartiendo dudas y buscando respuestas. A partir de ella podremos:

• Generar modelos teóricos de interpretación de la realidad educativa.
• Constituir propuestas de innovación pedagógica
• Proponer enfoques teórico-metodológicos para mejorar la enseñanza y el aprendizaje
• Diseñar propuestas de actualización y mejoramiento del desempeño docente.

La investigación educativa nos permite abrir diversas líneas de investigación, como por ejemplo
• Didáctica de las asignaturas.
• Psicología de los adolescentes.
• Psicología del aprendizaje, etc.
El hecho de señalar probables líneas de investigación no significa que sería obligatorio abrirlas todas, más bien el ejemplo es con la intención de señalar una diversidad de temas sobre los que podemos indagar.

Todo esto hace necesario que desde la Subjefatura Técnico-Pedagógica y desde los sectores se aprenda a diseñar protocolos de investigación como parte de la planeación estratégica y de la planeación operativa de cada año escolar. Considerando además que las experiencias acumuladas por el supervisor deben regresar a los docentes, y con ellas avanzar hacia la definición de una pedagogía propia.


Acciones de supervisión derivadas de la investigación educativa:

• Definir líneas y protocolos de investigación.
• Desarrollar diversos proyectos de investigación educativa y publicitar sus resultados ante las comunidades académicas con las que se relaciona.
• Elaborar y organizar colegiadamente, con base en los resultados arrojados por la investigación educativa, programas de asesoría, cursos, talleres, etc., que favorezcan la superación académica de los profesionales en la educación.
• impulsar la innovación e intercambio de las estrategias educativas de directivos y docentes a partir de la evaluación continua del proceso educativo y de sus resultados.
• promover la creación e intercambio de estrategias de evaluación de los conocimientos, hábitos, habilidades, actitudes y valores logrados por los alumnos, a través del proceso educativo para detectar problemas y buscar alternativas de solución.
• Propiciar el intercambio de experiencia sobre innovaciones metodológicas y de recursos didácticos entre las comunidades escolares.
• Proporcionar orientación y apoyo a la comunidad escolar sobre el análisis de la documentación que permita la detección, prevención y solución de problemas educativos.


4.2 PLANIFICACIÓN
Es la acción de organizar, proyectar y programar las políticas, acciones y actividades que permitan alcanzar los propósitos que definen una institución. La planeación estratégica es resultado del consenso de todos los actores que tienen un nivel de responsabilidad y que por lo tanto se asumen como corresponsables en el cumplimiento de las tareas. Desde esta perspectiva de planificación se asume que la misma no es un instrumento rígido o inflexible, sino una guía que debemos flexibilizar, reconociendo el factor humano y las dinámicas institucionales, lo que en su conjunto representa elementos que no siempre podemos controlar. En síntesis, es necesario mirar la planificación como la herramienta que marca la pauta de la acción, pero que en ningún modo la determina plenamente. No es un instrumento de control, ni conduce a procesos automatizados, sino dialécticos; aunque ello no debe hacernos olvidar que en la misma reconocemos los principios de trabajo y valores que marcan la ética del desempeño laboral y profesional, podremos negociar el cambio de fecha para el cumplimiento de una tarea, pero jamás la moral de trabajo, podemos negociar un estilo de hacer las cosas, pero nunca los principios que son comunes a una organización social.
Considerando lo anterior la función supervisora en el plano de la escuela se contempla como la garante del desarrollo de los planes, programas y/o proyectos pedagógicos, llámense Plan Escolar, Plan Anual, Proyecto escolar, Plan Estratégico de Transformación Escolar, etc., que son nombres coyunturales asumidos por las políticas educativas vigentes. Lo importante es comprender que la función supervisora, tal como hoy la hemos definido, tiene como uno de sus propósitos generales, desarrollar la planificación pedagógica y aclarar los elementos metodológicos y técnicos de su construcción.

Reconocemos en el proceso de planificación tres momentos importantes: 1) El diagnóstico, que es resultado de la investigación; 2) la definición de propósitos (objetivos y metas), estrategias, actividades, recursos y tiempos; 3) La evaluación (de proceso, resultados y desempeños) y reorientación del trabajo.

NOTA: las acciones de supervisión derivadas de aquí se consideran más adelante en la dimensión organizativa y funciones docentes.
4.3 EVALUACIÓN

La evaluación es una etapa del proceso educativo. Una etapa de las más importantes, no basta un control al final de la labor docente como algo añadido desconectado del proceso educativo, como en general se ha venido haciendo.

Todos sentimos necesidad de una comprobación, de un control, de un balance de nuestras realizaciones que nos permita ver nuestro adelanto en el proceso personal como en el profesional. Mediante la correspondiente evaluación se determina la eficacia y el rendimiento en cualquier tarea.

En la programación nos proponemos alcanzar los objetivos respecto a … Una evaluación constante de lo que se ha logrado, permite aplicar las medidas más adecuadas para aumentar el rendimiento, para rectificar determinados objetivos, para replantear, quizá, todo el programa.

En el plano personal todos nos fijamos unos objetivos, unas metas a alcanzar al terminar los estudios, contamos con determinados medios, nos movemos en un ambiente característico y partimos de nuestras aptitudes, carácter, (de nuestra personalidad) y siempre estamos evaluando. Un fracaso nos hará rectificar en parte o en toda nuestra actuación y elegiremos otros medios.

La evaluación implica la aplicación de métodos rigurosos para determinar el progreso de un proyecto en el proceso de alcanzar su objetivo durante su ejecución, o también para determinar si logró y cómo logró, o no, dicho objetivo. El proceso de evaluación combina diferentes tipos de información con los criterios y puntos de vista de las personas participantes o afectadas.

Para la evaluación utilizamos herramientas de campos tales como la estadística, economía y antropología y esta basada en campos y procedimientos de la metodología de investigación científica. No obstante, más que nada, la evaluación interna en una institución como telesecundaria se basa en un contexto de evaluación institucional proporcionado por los involucrados.

Aunque existen varias definiciones de la evaluación todas incorporan tres principios básicos:
1. La evaluación es una actividad sistemática y continúa
2. La evaluación esta integrada en el proceso educativo
3. Su finalidad es mejorar
La evaluación es un escrutinio, lo más sistemático y objetivo posible, de un proyecto, programa o política en ejecución o terminada, y sus dimensiones de diseño, ejecución y resultados. El propósito es determinar la pertinencia, efectividad, impacto y sustentabilidad del programa. Una evaluación debe proporcionar una información que sea creíble y útil, para permitir la incorporación de la experiencia adquirida en el proceso de adopción de decisiones.

1. La evaluación es una actividad sistemática y continúa.
Tradicionalmente se ha considerado que la evaluación de proyectos se concentra en el análisis ex post. La práctica actual considera a la evaluación como una actividad vital de tipo continuo, que no solo proporciona información correctiva a nivel de los proyectos, sino también un entendimiento de los problemas a nivel del programa, política y estrategia. Además mientras más se aproxima la evaluación a la dimensión política más se aleja de lo cuantitativo y se acerca uno a lo cualitativo.

2. La evaluación esta integrada en el proceso educativo.
En lugar de basarse únicamente en los puntos de vista de un solo evaluador en distintas etapas, un grupo mucho mayor de involucrados ayuda a dar forma a la evaluación e interpretar sus hallazgos.
La meta de la evaluación básicamente ha pasado de la auditoria y culpabilidad a la meta actual del entendimiento y el aprendizaje en función de experiencias adquiridas.

3. Su finalidad es mejorar y se caracteriza porque es:
• Formativa
• Sumativa
• De proceso
• De resultados
• Imparcial
• Creíble
• Útil
• Participativa
• Retroalimentadora

Etapas de desarrollo de la concepción sobre evaluación
ETAPA INTERESES
Primera generación. Medición
(Fines del siglo XIX)
Identificación del logro de ciertos objetivos específicos, mediante la medición cuantitativa con instrumentos unimodales.
Segunda generación. Descripción/Comparación
(1920-1950) Identificación de conjuntos de aspectos optimizadotes y usando métodos experimentales limitantes con respecto a ciertos objetivos establecidos; comparación de enfoques, o de fenómenos, en grupo y situaciones de ocurrencia natural.

Tercera generación
Servicios de valor (1950-1980). Comparación de resultados múltiples con metas y normas establecidas a priori; evaluación normativa, relacionada con datos de referencia e indicadores.

Cuarta generación, Transparencia,
Responsabilidad ejecutiva y desempeño
(1980 a la fecha) Transparencia, responsabilidad ejecutiva, desempeño coordinados por medio del análisis de todos los datos disponibles, usando una variedad de métodos y mediciones múltiples e incorporando el conocimiento, las perspectivas y los valores de todos los involucrados.



Acciones de supervisión ligadas a la evaluación.

• Generar y enriquecer una cultura de la evaluación continua considerándola como un proceso que da lugar a la toma de decisiones, que coadyuven a una mejor calidad del servicio educativo
• Evaluar, a través de visitas periódicas a los planteles, las estrategias que se estén aplicando en la resolución de los problemas pedagógicos y administrativos que han detectado.
• Realizar reuniones colegiadas periódicas en cada nivel y modalidad de educación secundaria, así como entre estos, para llevar a cabo el seguimiento y evaluación de las acciones programadas y ajustar el proceso según lo exijan las diversas circunstancias y las nuevas necesidades, así como comparar resultados de zona entre zonas.
• Organizar, promover, desarrollar y evaluar actividades de extensión educativas (deportivas, sociales, ecológicas, recreativas y de salud) y de vinculación con la comunidad, a fin de fortalecer la formación integral del educando
• Dar seguimiento a los Proyectos Educativos de cada escuela para facilitar la toma de decisiones.
• Impulsar la innovación de las estrategias educativas de directivos y docentes a partir de la evaluación continua del proceso educativo y de sus resultados.
• Promover la creación e intercambio de estrategias de evaluación de los conocimientos, hábitos, habilidades, actitudes y valores logrados por los alumnos a través del proceso educativo para detectar problemas y buscar alternativas de solución.
• Evaluar las acciones de superación académica diseñadas para dar respuesta a las necesidades técnico pedagógicas del personal supervisado.

4.4 FORMACIÓN Y SUPERACIÓN PROFESIONAL

El desarrollo de las competencias didácticas de los docentes como mediadores del aprendizaje bajo los enfoques teóricos modernos, que como paradigmas están en constante cambio, exige una actualización permanente de los mismos. En este sentido la función supervisora establece entre sus propósitos atender las necesidades de superación profesional que vayan surgiendo. De aquí se derivan las siguientes...


Acciones de supervisión
• Estimular la iniciativa y el potencial creativo de los participantes en el proceso educativo para elevar la calidad de la educación.
• Elaborar y organizar colegiadamente, con base en los resultados arrojados en el diagnóstico, programas de asesoría, cursos, talleres, etc., que favorezcan la superación académica de los profesionales en la educación.
• Mantener informados a los directivos y docentes sobre actividades de actualización y superación académica impartidos por autoridades y centros educativos.
• Impulsar el conocimiento y empleo de la Guía Didáctica del maestro y otros materiales de apoyo técnico pedagógico que se diseñen para el mejoramiento del desempeño profesional docente.
• Estimular a los directivos y docentes para que participen en acciones de superación académica que les permitan manejar los contenidos programáticos y desarrollar sus funciones con eficiencia y eficacia.
• Fortalecer la formación pedagógica del supervisor a través de reuniones colegiadas entre los niveles y modalidades de Educación Secundaria.
• Propiciar el intercambio de experiencias e innovaciones metodológicas y de recursos didácticos entre las comunidades escolares de las zonas de supervisión.

4.5 MEDIACIÓN Y REORIENTACIÓN DE PROCESOS

Tomando en cuenta los elementos metodológicos aportados desde el PEC para la elaboración del Plan Estratégico de Transformación Escolar (PETE), consideramos las dimensiones de la gestión educativa que propone para su estructuración, y que determinan aspectos a observar y dar seguimiento desde la práctica de la supervisión, como proceso de mediación. Ya no definimos a cada dimensión, pues esto ya esta establecido en los documentos orientadores del PETE.



4.5.1 DIMENSIÓN PEDAGÓGICA – CURRICULAR
Práctica Directiva (Contexto Escuela)
EL CLIMA DE TRABAJO.

• Generar un clima de confianza, apertura y empatía con la comunidad escolar que favorezca la comunicación, logrando el aprecio profesional a la labor de supervisión.
• Propiciar y mantener por diferentes medios la comunicación dinámica entre los miembros de la comunidad escolar y de estos con las autoridades, favoreciendo un ambiente escolar propicio para un desarrollo armónico de las relaciones humanas y el desarrollo integral del educando.
• Mantener una adecuada comunicación entre supervisores, directivos y docentes de nivel, así como entre niveles y modalidades con el propósito de concretar acciones para mejorar el servicio educativo
• Fomentar la comunicación entre el supervisor y la comunidad escolar para la solución conjunta de problemas que se presenten en el proceso educativo
• Establecer y mantener una adecuada comunicación con el personal de apoyo técnico, con el propósito de concentrar acciones para mejorar el servicio educativo
• Estimular y fortalecer el liderazgo directivo como base para un buen desarrollo institucional.



4.5.1 DIMENSIÓN PEDAGÓGICA – CURRICULAR
Práctica docente (Contexto aula)

EL DESARROLLO DEL MODELO PEDAGÓGICO

• Asesorar al personal directivo y docente sobre aspectos técnicos y pedagógicos que enriquezcan la práctica educativa y fortalezcan el modelo pedagógico de telesecundaria.
• Analizar junto con el personal docente y directivo la planeación didáctica del maestro clarificando las adecuaciones que hacen al Plan y Programas de Estudio.
• Realizar una observación participante de las variables e indicadores que den cuenta del desarrollo exitoso del modelo pedagógico, aplicando el método y técnicas adecuadas a este propósito, cumpliendo además con las tareas derivadas de la investigación educativa que realiza.
• Brindar orientación y apoyo al personal escolar en la elaboración de materiales didácticos complementarios al uso de los medios tecnológicos.
• Apoyar la canalización de casos de aquellos alumnos que requieran de algún servicio especializado, propiciando los acuerdos necesarios con las instituciones indicadas para la atención a los alumnos con necesidades educativas especiales, respetando la equidad establecida en la ley.
• Promover el apoyo y enlace con otras instituciones respecto a metodologías que propicien innovaciones para incrementar la calidad de la educación.
• Motivar el intercambio de experiencias didácticas exitosas en el aula y en la gestión educativa que ayuden a rescatar aquellas acciones que demuestran su eficiencia.
• Dentro de las facultades que tiene el Departamento y Jefaturas de Sector, estimular y reconocer el esfuerzo docente que logra un desempeño institucional ético, profesional y colaborativo, digno de promoverse como ejemplo del logro educativo.
• Apoyar las acciones encaminadas a la dotación de recursos didácticos y deportivos, así como su conservación y mantenimiento.



4.5.2 DIMENSIÓN ORGANIZATIVA Y FUNCIONES DOCENTES

FUNCIONAMIENTO DEL CONSEJO TÉCNICO ESCOLAR
• Difundir y propiciar el análisis de los documentos que norman el funcionamiento de los consejos técnicos, como base para garantizar la gobernabilidad y el consenso de los actores educativos
• Acompañar el funcionamiento del Consejo Técnico Escolar como el órgano central de trabajo colegiado, para la toma de decisiones que orientan el desarrollo escolar y para encontrar alternativas de solución a los problemas específicos a través de la planeación, operación y evaluación de proyectos educativos que eleven la calidad de la educación.
• Fomentar el trabajo colegiado como una estrategia de autogestión que favorezca el servicio educativo.
• Impulsar y apoyar la integración de la Sociedad de Alumnos como órgano de apoyo educativo, reconociendo en los jóvenes su capacidad critica para aportar al mejoramiento de su educación.
• Promover la elaboración, articulación y desarrollo de los Proyectos Estratégicos de Transformación Escolar entre Jefaturas de Sector y Departamento para elevar la calidad de la educación.
• Favorecer el desarrollo de acciones colegiadas entre directores escolares y supervisores que fortalezcan la acción conjunta de todos los niveles de gestión.
• Promover reuniones técnicas entre supervisores, tanto por nivel como con los niveles y modalidades de Educación Secundaria, para tomar acuerdos conjuntos en los aspectos pedagógicos y administrativos que eleven la calidad del proceso educativo.




4.5.3 DIMENSIÓN ADMINISTRATIVA Y CONTROL ESCOLAR

• Verificar que la información registrada en los documentos administrativos se utilice para establecer acciones colegiadas tendientes a la solución de problemas educativos existentes.
• Comprobar la existencia y operatividad de documentos administrativos y pedagógicos, así como la información contenida en los mismos.
• Verificar que el personal de los planteles educativos dé cumplimiento a las normas y señalamientos establecidos para la operación de los servicios.
• Verificar que el personal escolar participe en todas las actividades inherentes a la formación del educando.
• Verificar que los directivos asesoren a las asociaciones de padres de familia en el cumplimiento del reglamento correspondiente y dar el apoyo necesario para que logren sus objetivos.
• Verificar la instrumentación de estrategias de evaluación que realimenten el proceso educativo.



4.5.4 DIMENSIÓN COMUNITARIA Y PARTICIPACIÓN SOCIAL
• Impulsar las demostraciones de lo aprendido como la estrategia didáctica fundamental para consolidar los aprendizajes y la oportunidad de estrechar los vínculos con la comunidad.
• Apoyo al personal escolar en la preparación y realización de eventos educativos, artísticos, cívicos, deportivos y recreativos
• Estimular el funcionamiento de los Consejos de Participación Social y las Asociaciones de Padres de Familia, como órganos de apoyo educativo.
• Instrumentar acciones que conduzcan al rescate de la función social que debe tener la escuela al servicio de la comunidad.
• Organizar, promover, desarrollar y evaluar actividades de extensión educativa (deportivas, sociales, ecológicas, recreativas y de salud) y de vinculación con la comunidad, a fin de fortalecer la formación integral del educando.
• Instrumentar acciones que conduzcan al rescate de la función social que debe tener la escuela al servicio de la comunidad.
• Promover el apoyo y enlace con otras instituciones respecto a metodologías que propicien innovaciones para incrementar la calidad de la educación.













V
CARACTERÍSTICAS PERSONALES Y COMPETENCIAS PEDAGÓGICAS
DE LOS RESPONSABLES DE EJERCER LA FUNCIÓN SUPERVISORA

Establecemos estas características como elementos esenciales para el éxito de este modelo de supervisión.


5.1 PERSONALES

 Tener iniciativa, responsabilidad y compromiso
 Ser analítico, critico, creativo e innovador
 Tener capacidad de organización y administración de recursos
 Facilidad en la expresión oral y escrita
 Habilidad en el manejo y control de grupos de trabajo
 Capacidad para solucionar situaciones conflictivas y tomar decisiones
 Madurez de criterio
 Criterio para sugerir sistemas de trabajo
 Espíritu de apoyo y colaboración
 Disponibilidad para realizar actividades fuera del horario de trabajo
 Capacidad para integrarse y completar procesos de formación
 Dominio de la tecnología de punta
 Sólida formación en valores








5.2 COMPETENCIAS PEDAGÓGICAS

PERFIL
PROFESIONAL HABILIDADES, CAPACIDADES Y EXPERIENCIA SABERES Y CONOCIMIENTOS COMPLEMENTARIOS
 Trayectoria y Reconocimiento en la función Técnico Pedagógica

 Licenciatura o Normal Superior

 Nivelación Pedagógica

 Pedagogo o Formador de Formadores

 Disposición al trabajo colegiado y compromiso con la vida académica

 Liderazgo académico

 Experiencia frente a grupo  Supervisión técnico pedagógica

 Planeación, organización, ejecución,
seguimiento y evaluación de proyectos educativos o de actividades técnico pedagógicas

 Intervención y mediación pedagógicas

 Manejo y aplicación de teorías

 Manejo y aplicación de estrategias de enseñanza y aprendizaje

 Promover el trabajo sistemático y colegiado

 Autoformación continua y permanente y aprendizaje colaborativo  Conocimiento del modelo pedagógico y la metodología de Telesecundaria, así como del enfoque, la didáctica y los contenidos de las asignaturas

 Teorías y corrientes pedagógicas, psicológicas y sociológicas


 Metodología del acompañamiento pedagógico

 Investigación educativa


 Tecnológicos

 Administración, política y legislación educativa.







PARTICIPANTES

LIDERES SECTORIALES DEL PM2:

PROFR. ROGELIO GUEVARA VENANCIO
PROFR. JOSÉ LUIS HERRERA ALMAZÁN
PROFA. ELSA SALAS CHÁVEZ
PROFR. SERGIO GERMÁN LAZCANO OROZCO


COLABORADORES:

PROFA. ANA MARIA RUIZ AYALA
PROFA. MARTHA CRUZ TOLEDO
PROFR. VÍCTOR MANUEL OLVERA BECERRIL
PROFR. MARCO ORTIZ VÁZQUEZ



COORDINADOR GENERAL:

PROFR. FELIPE DE JESÚS ECHEVESTE ZAVALA
LÍDER DEPARTAMENTAL DEL PM2